Los expertos señalan la falta de recursos y de formación del profesorado como los mayores obstáculos para avanzar en la integración de los alumnos con necesidades especiales en España.
Dislexia, trastornos por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), síndrome de Down, trastornos del Espectro del Autismo (TEA), discapacidades auditivas, motoras o visuales… Hablar de necesidades especiales en el aula es hacerlo de un amplio abanico de estudiantes que demandan un apoyo específico garantizado tanto desde la Convención Internacional de Naciones Unidas sobre derechos de las personas con discapacidad como de la propia Constitución Española, en su artículo 27, y a través de normas específicas como la Ley General de derechos de las personas con discapacidad y de su inclusión social. Sin embargo, la forma en que se observan esos derechos varía mucho dependiendo de cada Comunidad Autónoma y de los recursos que dediquen a ello las diferentes administraciones implicadas.
“La sociedad no está preparada para atender a la diversidad, y por tanto es muy difícil que su sistema educativo lo esté. Hay un vacío muy grande en la formación de los profesores… Un profesor universitario tiene un dominio muy específico de un área de conocimiento, pero no sobre didáctica, metodología, psicología o antropología”, sostiene Sonia Escorial, responsable de la Unidad de Atención a la Diversidad de la Universidad Europea. Según un reciente informe de Comisiones Obreras, por ejemplo, el 72 % de los alumnos con necesidades especiales en la Comunidad de Madrid están desatendidos debido a la falta de especialistas.
Más información: El País.